El contrabando de productos avícolas como pollos y huevos se ha convertido en un problema sumamente grave para la industria local. Cada día que pasa se complica aún más la situación, principalmente, por la nula intervención de los organismos de control del Gobierno, lo que podría generar que cientos de familias se queden sin el sostén de sus precarias economías.
Al respecto, Blanca Ceuppens, presidenta de la Granja Avícola La Blanca, manifestó que desde el inicio de la pandemia aumentó el contrabando de pollos y huevos, que ya afectó más del 30% de las ventas.
“Desde la pandemia que el contrabando ha crecido exponencialmente, ingresan desde Argentina y Brasil, con precios que marcan un diferencial muy grande. Sabemos que, en la Argentina, la agricultura es subvencionada por sus precios de granos, entonces es muy difícil de competir, ya que la materia prima, que es el maíz y la soja, en el vecino país está 30% subvencionada”, señaló.//LaNacion